Las cadenas del hábito, por lo general, son demasiado pequeñas para poder notarlas, hasta que se vuelven demasiado fuertes para poder romperlas.
Samuel Johnson

domingo, 20 de julio de 2014

Educacion ambiental

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Despues de un año de intenso trabajo , los bancales de  el “Hort de les flors” ya están en plena producción y la orla  ornamental  que lo enmarca todo, luce en plena floración.
Ha llegado el momento de poner en marcha la parte didáctica  del proyecto, con visitas guiadas  para que los escolares  entren en relacion con el mundo natural al que todos pertenecemos.
En esta fase de educación ambiental, los niños y las niñas aprenden que las verduras no crecen de seis en seis en las bandejas del supermercado,  sino que existe todo un mundo fascinante en torno al  cultivo de plantas y la fauna asociada. Y que la biodiversidad es un milagro con el que convivimos sin advertir su importancia para nuestra supervivencia como para nuestro bienestar emocional. 

Cada jueves El “Hort de les flors” recibe a los peques del parque infantil “La bruixeta” y con ellos observamos mariposas. Identificamos flores e insectos.
  Este contacto con los procesos naturales  va creando un lazo afectivo hacia la naturaleza que les mueve a construir, en un futuro que les pertenece, un mundo mas respetuoso hacia ella.

Jesus Arnau

viernes, 4 de julio de 2014

Escola de Estiu

El “Hort de les flors se ha inundado con los alumnos de la “Escola de estiu”.
En turnos de dos clases (40 alumnos).
Han disfrutado de las orlas floridas y han visitado los bancales y  han recibido explicaciones de los del club de jubilados.

Lastima que al ser tan numerosos no ha sido posible ningún taller.

Jesus Arnau

miércoles, 25 de junio de 2014

Jardineria y belleza

La belleza no es algo prescindible ni secundario
Porque hay un deleite en su búsqueda y contemplación que va mas alla de la evasión o el divertimento.
Ese impacto emocional que nos pone una sonrisa en los labios, o la carne de gallina es tan real que  afecta nuestra vida incluso fisicamente. En ocasiones es tan fuerte, que nos invade una paz beatifica o una vivificante excitación llega a provocarnos sensaciones de ingravidez.
Aunque nos llegue en forma de estimulo sensorial tan intangible, no es algo menos real que comerse un plato de nuestro manjar predilecto, por mucho que su impacto en nuestra vida sea tan difícil de cuantificar.

En este mundo cuya naturaleza y propósitos se nos escapan, la búsqueda de la belleza es la luz que nos sostiene.  Seguramente algún dios después cometer el crimen de hacernos conscientes de nuestro previsible decaimiento, la muerte de los seres queridos y la nuestra propia, se compadeció y creo la belleza como medicina paliativa de tan abusiva carga.
Solo paliativa porque al final llega igual la decadencia y la muerte. Pero mientras tanto, fascinados por sus colores caleidoscópicos,  olvidamos la evidencia de que no entendemos un mundo, al que no parecen importarle nuestros sufrimientos y ese necesario olvido permite que nuestra vivencia se impregne de sentido. 
Si no existiera la belleza, que seria de nosotros cuando la vida nos aprisiona en rutinas anodinas de las que nuestra mente y nuestras emociones huyen en defensa propia. En que droga destructiva  nos refugiariamos cuando nos vemos obligados a gastar nuestro tiempo en cosas que no nos interesan.
Nuestro tiempo que es lo único que en realidad tenemos.
Ese irreemplazable tesoro que de forma incomprensible a veces vendemos solo para obtener la aprobacion de nuestro entorno o lo que en él es normal tener.
Y con esa venta renunciamos también al alimento emocional que conlleva poner ilusión en lo que estamos haciendo. Persiguiendo lo que hemos decidido que es urgente, dejamos de lado lo importante y nos vamos sintiendo desnutridos y la vida parece ir perdiendo sentido.
Cuando no podemos poner ilusión en lo que hacemos ni podemos implicarnos emocionalmente en ello, caemos en un estado de muerte anticipada porque ya no vivimos solo sobrevivimos.
El único recurso que nos queda en esta critica situacion, es un contacto aunque sea esporádico con la belleza. Una dosis de urgencia que impida el colapso de la esperanza, y un plan para recuperar lo que nunca debió perderse.
La belleza moviliza emociones, nos vivifica. Al absorberla, revivimos como la semilla reseca con el agua de lluvia y como ella emitimos tiernos brotes que nos traen de vuelta el sentido de la vida que se había agostado.
La belleza es el ultimo refugio. Es la plenitud de ese instante en que la alcanzamos, lo único que le quita argumentos a la muerte.
¿Pero porque jardineria?
Que tiene de particular la jardinería comparada con otras artes?  
Es como todo arte, una actividad en busca de la belleza. Pero no una belleza estatica como el resto de obras de arte con soporte físico, sino dinámica. El mismo dinamismo de la vida. Un jardín nunca se termina sino que sigue su propia evolución a lo largo de las estaciones y de los años, en parte reflejo de la del jardinero.
Miras el jardín un dia y sabes que esa belleza pertenece a una imagen y un momento únicos que nunca volverán a repetirse aunque lo intentaras con todos tus recursos.
Cambiara de estación y se mostrara diferente y esa mirada te sugerirá un cambio que en alguna medida afectara a todo el conjunto. Cambiaran tus necesidades emocionales e inevitablemente se reflejará en el jardín.
En cada disciplina o arte, esa búsqueda desesperada y necesaria de la belleza implica uno o varios sentidos. En la pintura es la vista, en la  música el oído, en la cocina el gusto, en la perfumería el olfato, en la escultura el tacto………..
La jardinería es un arte que implica todos los sentidos incluyendo además implicaciones emocionales pues se nutre de estimulos sensoriales provocados por el contacto con seres vivos y elementos naturales que son para los humanos símbolos ancestrales de supervivencia.
Incluyendo en nuestras composiciones plantas hortícolas con cualidades ornamentales, tendemos un puente para reencontrarnos con la realidad de nuestra pertenencia a la naturaleza y nuestra dependencia de ella y sus procesos.
Asi es como la jardineria deviene el arte de las artes.

Jesus Arnau

sábado, 21 de junio de 2014

L´hort de les flors   


Perspectiva desde la orla ornamental oeste, hacia los bancales
 Diseño global entorno al concepto de huerto-jardín ecológico como punto de encuentro social para compartir experiencias, sabiduría, ocio, semillas. Integra en un mismo contexto la creación de, huertos ecológicos, urbanos, y escolares, un espacio para huertos sociales. Rodeado por una orla de espacios ornamentales con fines ecologicos y terapeuticos....                       
Una de las máximas del diseño del proyecto y su ejecución hasta ahora ha sido “Hacer bello lo práctico y práctico lo bello”. Para ello se ha intentado generar un espacio de “belleza útil”, que rebose sensaciones, descubrimientos, miradas asombradas y movilice emociones
Nos mueve el convencimiento de que nada es tan terapéutico como el contacto con la naturaleza y con los seres vivos, ya que representan símbolos ancestrales de supervivencia y quizá sea por eso que como dijo Edward O. Wilson, “El ser humano tiene a nivel emocional, una necesidad innata de contacto con  todo lo que es vida” (Biofilia). Si pensamos que en nuestra vida cotidiana todo a nuestro alrededor es artificial, es fácil que acabemos emocionalmente desnutridos.
Como parte del proyecto,impartimos un curso de Horticultura y jardinería ecológica cada jueves en un local cedido por el ayuntamiento.
Mes de junio de 2014
Jesus Arnau




Dos colaboradores : Cosme y Orestes, comentando las labores

Jacinto en su parcela
Vista de la entrada

Orla del norte plantada por los niños de la
visita guiada de un colegio
Orestes en su guerra particular contra las hierbas
que se empeñan en crecer en lugar equivocado
Lugar de reunion. Emplazamiento de la futura pergola, para actividades sociales
con un equipamiento provisional
http://www.lacalamanda.com/la_porta_verda/1208/lhort-de-les-flors-un-paradis-en-el-nucli-urba





miércoles, 18 de junio de 2014

El sentido del asombro


Rachel Carson, hizo historia en el mundo ambientalista con su libro "La primavera silenciosa" 1962, en el que denunció el uso indiscriminado del  DDT, señalando sus dañinas consecuencias para la salud pública y la naturaleza.

“ Era una primavera sin voces. En las madrugadas que antaño fueron perturbadas por el coro de gorriones, golondrinas, palomas, arrendajos y petirrojos y otra multitud de gorjeos, no se percibía un solo rumor, sólo el silencio se extendía sobre los campos, los bosques y las marismas”.
¿Qué es lo que ha silenciado las voces de la primavera en incontables ciudades de Norteamérica?”

Con esta pregunta que sugiere que usando indiscriminadamente los plaguicidas hemos exterminado las aves y los insectos, comienza la primavera silenciosa que tras 50 años sigue siendo un best seller. La posibilidad real del escenario que describió Carson conmocionó a la sociedad norteamericana de los años 60.
El revuelo que produjo esta publicación provoco la aparición del ecologismo moderno y los grupos conservacionistas.

El libro El sentido del asombro, fue en origen un artículo que le encargó la revista woman´s home companion, que lleva por título “Ayuda a tu hijo a asombrarse” que después se llamó “El sentido del asombro”.
El sentido del asombro es un libro de reflexiones y experiencias a lo largo de su vida cuidando a su sobrino Roger. Rachel que nunca se casó ni tuvo hijos partió de lo que ella más amaba y disfrutaba para entretener a su sobrino: pasar horas cerca de los bosques y el mar de Maine. Cuando Roger tenía tan sólo 20 meses empezaron sus aventuras juntos. La acogida sencilla y entusiasta de la naturaleza por parte del niño cautivó a Carson. La fuerza de las olas, el ruido del viento, el olor del mar, la oscuridad de la noche, nada producía temor al niño más bien todo lo contrario.
La capacidad de asombrarse se tiene desde muy niño. Todos los que hemos estado con algún bebé o niño pequeño vemos el estado natural de este sentido. El asombro provoca lanzarse a descubrir un mundo porque fascina y al tiempo se percibe como algo que no es ajeno. Carson reconoció este sentido del asombro como el original para acercarse al mundo. De esta experiencia nació su certeza de que una vez despertado, este se convierte en una necesidad para disfrutar la naturaleza y la propia vida.
Rachel Carson no tenía ninguna pretensión de enseñar a su sobrino toda su ciencia o clasificación taxonómica. Quería simplemente que surgiera el “wonder” (En ingles “The sense of wonder”). Esta palabra en inglés tiene una doble acepción; la de sorprenderse y la de preguntarse. Esta feliz integración de los significados en una misma palabra en inglés, refleja el proceso natural que sucede. Al maravillarse uno se conmueve siempre y surge naturalmente multitud de preguntas que requieren conocer más, como el niño pequeño reaccióna ante la naturaleza; todo lo quiere tocar, todo lo que saber y todo lo pregunta.

 Carson intuyo que este sentido natural, que todos poseemos, iba a mermarse ante el avance de una tecnología que tendía a separarnos del contacto con la naturaleza. Ella sospecho que aquella época que le tocó vivir cuando se crecía al aire libre, iba a tener los días contados. El tiempo en el que la naturaleza era parte del hogar, los niños jugaban a bañarse en el río, construían cabañas en el arbol y se tumbaban en campos de trigo, estaba próximo a acabarse. Es por eso que Carson vio imprescindible cultivar el sentido del asombro.
El método de Carson consiste en que un adulto acompañe al niño en la aventura de descubrir las maravillas de la naturaleza. ¿O tal vez el niño sirve de lazarillo al adulto que se ha vuelto ciego a ese sentido del asombro ante las maravillas de la naturaleza. Ese don que supone un inagotable antídoto contra el aburrimiento y el desencanto que vendrán en años posteriores. La esteril preocupación por problemas artificiales y el distanciamiento de la fuente de nuestra fuerza : La belleza innata del mundo y la  naturaleza
Sólo el estupor, y la fascinación que nos hace sentir, provoca el conocimiento y cuidado de la naturaleza. Lo demás es lo de menos.
Carson nos recuerda que desligar conocimiento y afecto ante la maravilla de la naturaleza no conduce a mucho.
Para Carson lo esencial es estar: estar atentos, saber ver, dejarse asombrar, preguntarse. Para no anular nuestro propio sentido del asombro y por tanto el de nuestros hijos o nuestros estudiantes. Posicionarnos una y otra vez ante la naturaleza y lo que nos rodea con el sentido del asombro que ya poseemos.

Es un libro que rezuma sensibilidad belleza y amor por lo que dice y escribe y el que lo lee queda rendido ante tanta ternura.

sábado, 14 de junio de 2014

Hacer crema de calendula en casa



Ingredientes

  • Aceite de almendras, que puedes reemplazar por aceite de oliva
  • Cera virgen de abejas
  • Flores frescas de caléndula ó la tercera parte en caso de conseguir flores secas

El procedimiento es sencillo:

•     Llenar 2/3 de un tarro con flores de caléndula frescas o 1/3 si son secas
•     Acabar de rellenar con aceite de oliva virgen.
•     Macerar durante cuarenta días para que los principios activos pasen al aceite.
•     Colar el aceite.
•     Calentarlo al baño maria e ir agregando la cera y removiendo la mezcla.
•     Introducimos en la mezcla una cuchara, y  al sacarla la crema adherida a ella se 
             solidificará y podremos comprobar la consistencia que tendrá al enfriarse.
•     Si esta demasiado fluida, añadimos cera.
•     Proporcion aproximada: 50 gramos de cera por ½ litro de aceite
•     Cuando hemos conseguido la textura adecuada con una adecuada proporción entre
             aceite y cera, podemos agregar unas gotas de algún aceite esencial de lavanda o
             manzanilla, para aumentar las propiedades descongestivas. 

Beneficios     

1.     Previene la piel seca. Su uso mantendrá nuestra piel perfectamente hidratada y húmeda.
2.     Es muy aconsejable para tratar moratones, cortes o quemaduras. Mejora el proceso de curación y minimiza las cicatrices.
3.     Tiene un efecto calmante cuando la piel está irritada. Su uso está aconsejado en casos de psoriasis o eczema.
4.     Su uso previene la dermatitis.
5.     Es ideal para calmar las molestias producidas por las picaduras de insectos.
6.     La crema de caléndula es un buen antioxidante por lo que es ideal para luchar contra los radicales libres.
7.     Alivia inflamaciones de la piel.
8.     Sus propiedades cosméticas y cicatrizantes aseguran resultados increíbles en la recuperación de llagas, ulceraciones de la piel y quemaduras.
9.     Calma el dolor de quemaduras, rozaduras, paspaduras, fisuras y desgarros de la piel.
10.  Promueve la regeneración cutánea y su capacidad inmunológica.
11.  Posee propiedades antisépticas naturales.
12.  Nutre la piel en profundidad dejándola suave y tersa